Llegó la primera gran cita europea en la superficie favorita de los tenistas españoles, la tierra batida. Rafa Nadal debutaba en el Masters 1000 de Montecarlo ante el francés Pouille, y lo hizo fantásticamente bien, ganando dos sets a cero y sin dejar ninguna opción a su rival.
Poca oposición encontró el manacorí en la pista, Pouille solo aguantó 1 hora y 8 minutos, por lo que sucumbió ante el terremoto balear por un marcador de 6-2/6-1. El partido de Rafa fue muy completo, apenas cometió errores y el número de winners alcanzó los 13 y tan sólo cometió 5 errores no forzados. El hecho de cambiar de raqueta ha podido ser clave en la mejoría que ha mostrado el Nadal de hoy respecto al de hace días. La nueva raqueta le permite golpear con más potencia y dar diferentes efectos a la bola.
Sí alguien no ha podido ver el partido pero si las estadísticas podrá observar que Rafa ha sido muy fiable con su primer servicio, ha ganado el 89% de los puntos jugados con el primer servicio, además de no haber permitido al jugador nº 108 de la ATP tener ninguna oportunidad de break,
El tenista español se enfrentará mañana a partir de las 14:00 h al estadounidense Isner, un partido que se antoja complicado, pero que seguro que si sigue como ante el francés no tendrá problemas para avanzar a la siguiente ronda y luchar por el que sería su noveno trofeo de Montecarlo, la última fue en el año 2012.
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