El partido iba a iniciarse con una Juventus más ofensiva, como era de esperar, pues el resultado en su casa había sido de 1-2, por lo que los locales tenían todo de cara, por su lado la Fiore no iba a defender, pero tampoco tenía prisa por asumir el peso del partido, error que acabó pagando caro, pues se jugó a lo que los de Turín quisieron, estos tocaron cuando tenían que tocar, presionaron arriba y esa presión acabó dando muchos frutos, ya que el primer gol llegaría tras un robo en campo local, y al final Alessandro Matri recibía un rechace y anotaba en contra de su ex-equipo. Muchos aficionados violetas tuvieron que acordarse de la mala temporada que cuajó vistiendo la camiseta de su equipo tras recibir el gol. A partir de ese gol, los locales intentaron llevar algo más el ritmo del partido, viendo que con otro gol estaban fuera e intentando entonces anotar el gol que les diese una mayor tranquilidad, de hecho, anotaron dos, pero ambos fueron bien anulados, uno al egipcio Salah por falta previa al gol y otro a Gonzalo Rodríguez por fuera de juego, y cuando perdonas lo acabas pagando, y el precio fue caro, pues Morata, para rematar su tremenda primera parte sacó un disparo al palo largo que rechazó Neto y volvió a rematar Roberto Pereyra al fondo de la red en el minuto 44, dejando así a la Fiore tocada para la segunda parte.
Era el fin de la primera parte y la Juventus ya estaba metida en la final, por lo que algo tenía que hacer Montella, ya que su equipo acusaba mucho la alta presión de los visitantes y sufría la falta tanto de Badelj como de Pizarro, ya que es vital que alguno de los dos esté en el campo y aporte más fortaleza defensiva. Por su lado, Allegri podía estar satisfecho tanto con la actitud de su equipo como con el juego demostrado, ahora les tocaba defenderse y esperar.
El segundo tiempo empezaba más equilibrado, la Fiorentina tenía que buscar un gol, y eso no parecía imposible, sin embargo, el mal partido de Borja Valero, Aquilani y Mati Fernández dificultaba mucho esta tarea, ya que Gómez no recibía balones y Salah tenía que ir a buscarlos al centro de campo, recibiendo con muchos jugadores por delante. Hasta el momento el planteamiento visitante estaba siendo perfecto, partido muy serio que obtuvo más frutos con el tercer gol en un córner, esta vez el tanto fue de Bonucci, que con una volea preciosa fusilaba a Neto dejando a los locales muy tocados a falta de 30 minutos para el final. Además los locales no parecían tener fuerzas para reaccionar, fuerzas que devolvía la entrada de Diamanti, que aportaba más dinamismo arriba. Sin embargo, poco podían hacer ya más que buscar un gol que diese esperanzas a los aficionados, y apunto estuvo de conseguirlo Mati Fernández que se topó con un paradón de Storari, al igual que la Juventus se topó en repetidas ocasiones con Neto, que impidió que el resultado fuese más abultado.
Así concluía el partido, con un 0-3 y la Juventus en la final, final que se han ganado, pues las eliminatorias son a 180 minutos, y ambos equipos dominaron 90, curioso es que cada equipo dominó los 90 que se jugaban fuera de su casa, pero fue la Juve la que dominó con más claridad y eso hace que el resultado final sea de 4-2 a su favor y que hoy en Turín estén pendientes de lo que pasa con el Napoles - Lazio, para esperar contrincante en la final.
La juventus se convierte así en uno de los pocos equipos que opta al triplete con Champions, siendo finalistas en la Coppa Italia y con el Scudetto en sus manos, mientras que a la Fiorentina le queda la Europa League y buscar el tercer puesto en liga, lo que está claro, es que ambos equipos van a dar que hablar en las competiciones que les quedan.
Redactado por: Antonio Guillén.
@Fartony8
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