Redactado por Inocencio Melendez @CMFoficial
Hoy se disputaba en la Caja Mágica la final del Mutua Madrid Open 2015 entre Andy Murray (número 3 del mundo) y Rafa Nadal (número 4) se antojaba una batalla dura por el juego de los dos aspirantes, con mucho peloteo. A pesar de que el "head to head" (15-5 en duelos directos y 6-0 en tierra) favorecía mucho al español y pronosticaba una victoria fácil de Rafa el escocés venía de una semana impresionante (además de haber sido campeón en München en la misma superficie) ganando todos los dias con mucha solidez y una soltura nunca antes en polvo de ladrillo, por lo que esto pintaba a partidazo.
El partido no podía empezar peor para los intereses del defensor del título, tras ganar Murray su saque en blanco el escocés disponía de las dos primeras bolas de rotura en el primer saque de Rafa, que no oponía resistencia y perdía su saque sin remedio. Murray seguía intratable y ganó su siguiente servicio con facilidad, en total había ganado 12 de los 14 puntos disputados, incluidos puntos largos y de fondo de pista.
A partir de este momento el de Manacor reaccionó un poco con su servicio, y empezó a coger ritmo (todo el que se puede coger jugando contra Murray) y a tirar por fin sus derechas con peso, pero todo esto se esfumaba cuando el que sacaba era el escocés, sino hacía saques directos o semi-directos, obligaba a Rafa a jugar muy por detrás de la línea de fondo, dejando al número 4 del mundo bolas para rematar con su revés o su derecha.
En el 4-2 todo pudo cambiar, Rafa tuvo 2 bolas de "break" con un 15-40, pero el destino no quería que ganara el español, estuvo a punto de aprovechar la primera, pero su derecha paralela se marchó larga por milímetros, y ahí prácticamente se acabó el set, después Murray neutralizó la segunda con un super saque, y para rematar la faena, Nadal volvió a enviar una derecha fuera por bastante poco, con lo que nos pusimos ya con 5-2. El manacorí siguió sólido al saque, y lo ganó fácil y ganó mucha moral para afrontar el siguiente y decisivo juego. Andy Murray empezó con dudas cometiendo una doble falta, y Rafa aprovechó esta circunstancia para meterle presión hasta que llegó "LA OPORTUNIDAD", pero se esfumó en un abrir y cerrar de ojos, y el británico apretó los dientes y sufrió para cerrar definitivamente el set ante un combativo Nadal.
Al contrario de lo que todos hubiésemos esperado (y más aún después de cómo terminó el primer set), un Rafa enchufado e intenso yendo a por la remontada, se le vio igual de descentrado que al comienzi de la primera manga, con muchos fallos, por no impactar bien la bola, por darla con el marco, por colocarse mal... En fin una serie de calamidades que le llevó a perder su primer y segundo juego de saque del set, todo eso más un Murray excelso en el revés y sólido como una roca nos dio un 3-0 en 10 minutos a favor del británico.
Con todo el pescado vendido se vio a un Murray muy superior y tranquilo, los golpes del español no le hacían ni cosquillas, y además su revés a dos manos le estaba funcionando mejor que nunca, con lo que nos pusimos 4-0. A Nadal solo le quedaba la heroica, pero con 4-0 y 0/3 en puntoa de rotura no pintaban las cosas a remontada histórica, aunque como siempre no se rindió, y siguió luchando hasta el final, pudiendo ganar únicamente sus 2 saques, dejando al escocés cerrar el partido tranquilamente con varios errores no forzados muy claros para acabar ganando su segundo Madrid Open (primero en tierra).
Con esta derrota el mallorquín pasa del puesto 4 en el ránking al séptimo, al perder 400 puntos sobre los 1000 que defendía como campeón el año pasado. Y Andy Murray culmina dos semanas espectaculares con 2 torneos en tierra batida y su primer Masters 1000 sobre dicha superficie, presentándose como claro favorito para los siguientes torneos sobre polvo de ladrillo, el Masters 1000 de Roma ésta semana y Rolland Garros en 2 semanas.
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