Fiorentina 2-1 Milan: Filippo Inzaghi se complica.

Ayer se citaban para la vigésimo séptima jornada de la Serie A en el Artemio Franchi dos equipos con aspiraciones diferentes, por un lado estaba la Fiorentina, con el objetivo de seguir enganchada la lucha por la tercera plaza, y quién sabe si a la segunda, después de la derrota de ayer de la Roma en el Olímpico. Y por otro lado el Milán, que lo único que se jugaba era el futuro de su técnico, Filippo Inzaghi. Por ello, este alineaba prácticamente todo su arsenal para conseguir sacar tres puntos a domicilio que hubiesen ampliado su margen de error, el Milán salía en Firenze con Diego López en portería, una defensa formada por Antonelli, Mexès, Paletta y Abate, con Essien y Van Ginkel algo más adelantados y Bonaventura, Honda, Ménez y Destro arriba, por su lado, Vincenzo Montella, dadas las exigencias actuales que tiene su plantilla, viva en copa, en EL y en liga, alineaba un once lleno de rotaciones, como viene siendo costumbre últimamente. En portería quedaba Neto, con Basanta, Rodríguez y Micah Richards como centrales y Rosi y Pasqual ejerciendo como carrileros con gran vocación ofensiva, en el centro de campo quedaban Aquilani, Kurtic y un Borja valero que sigue cogiendo forma, para dejar más adelantados a Ilicic y Gilardino.

Con estos 22 empezaba el partido, de una forma poco esperada, el Milán iba a por todas desde el principio por mediación de dos hombres, Honda y Ménez, pero esta superioridad continuó solamente hasta que la Fiore empezó a tocar y tocar, haciendo que el partido se equilibrase pero con pocas ideas, ideas que sí tenía el Milán, pues llegaba con mucho más peligro que el cuadro local, que consiguió mantener el empate gracias al gran estado de forma del sensacional portero brasileño Norberto Neto. La primera parte acabó con un aburrido 0-0, del que solo se salvó un palo de Basanta y una gran parada de Neto a Keisuke Honda, además de la velocidad y verticalidad de Ménez, que cuando la tocaba hacía sembrar el pánico en los aficionados violetas.

Pero Montella decidió arriesgar para la segunda parte y dio salida a Richards y a Aquilani dando entrada a Joaquín y a Badelj, esto hizo que la Fiore se apoderase de la segunda parte, no obstante, fue el Milán el que golpeó primero gracias a un contragolpe que terminó con un rechace que empalmaba Bonaventura para que Destro desviase el balón al fondo de la red, salvando el culo, hablando mal y claro, de su técnico, el Pippo Inzaghi, pero desde el gol, el Milán se replegó, haciendo gala del más puro estilo italiano y entonces apareció Joaquín para destrozar la defensa italiana, primero con un centro medido que remataba Rodríguez al fondo de la red y después con un cabezazo que se colaba por la escuadra de la portería visitante, ya casi en el minuto 90, que dejaba sin reacción a un Milán que se queda muy tocado y sin ningún objetivo más allá del de planificar el futuro para que sea muy diferente del presente que tienen, en el que solamente van de capa caída, por su parte, la Fiore se queda a 5 puntos del segundo puesto y le toca afrontar los partidos de vuelta contra la Juventus en coppa, en el que ganó 1-2 en la ida y la vuelta de octavos de Europa League contra la Roma, que se saldó con un empate a uno en la ida, gran trabajo de momento el de Montella, que demuestra un año más saber mantener a su equipo vivo en todas las competiciones posibles.

Redactado por: Antonio Guillén

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