Los Philadelphia 76ers han recibido la visita de los Dallas Mavericks, en un encuentro donde los 76ers solo tenían una opción: GANAR. Los 76ers han llegado al partido sin lograr ninguna victoria, y su récord se sigue alargando más y más, y el equipo, que ha mostrado mejorías en estos últimos partidos, sigue hundido en la miseria.
Vivimos una primera mitad muy igualada, y de hecho, al final del primer cuarto, la ventaja de los Dallas Mavericks tan solo era de 2 puntos (28-26). Los 76ers querían la victoria, la ansiaban, y estaban dispuestos a todos con tal de obtenerla.
Llegamos al descanso con un marcador más abultado, con una diferencia de 7 puntos para los Dallas Mavericks, con 58-51, con los 76ers dándolo todo para lograr su primera victoria, que aparentemente, se alejaba del conjunto de Philadelphia.
Hasta el descanso, la entrega de los 76ers, que estaban siendo remolcados por KJ McDaniels, no bastaba para vencer a los todopoderosos Dallas Mavericks,q ue se mostraban muy seguros y contundentes tanto en ataque como en defensa, pues se trata de uno de los equipos más poderosos de la NBA, y es uno de los favoritos para llevarse al título.
Mientras tanto, los Dallas Mavericks querían mejorar su gran marca de 12-3, con Tyson Chandler y Chandler Parsons al mando del equipo en este encuentro, y con un gran juego de conjunto, que estaba derrotando a los 76ers.
Llegó el arranque del tercer cuarto, con ambos equipos jugando con sus respectivos quintetos titulares, y los Mavericks lograron ganar un poco de ventaja, poniendose 66-56 en los 3 primeros minutos de juego. Entonces, llegó la eacción de los 76ers, que en 30 segundos, se colocaron 66-61, y empezaron a morder a los Mavericks, que veían como se empezaba a complicar en exceso el partido.
Los Mavericks reclamaron un tiempo muerto completo en ese momento, los 76ers aprovecharon para realizar una doble sustitución, y salieron de nuevo a la carga. Se pusieron a 2 puntos de los Mavericks, con 78-76 a falta de 4 minutos 10 segundos. A falta de 3 minutos 33 segundos, el resultado era de 80-79 para los Mavericks, y aparentaba que nada podría detener a los 76ers, que mejoraban a cada jugada que realizaban,
Cuando se cumplieron los 3 minutos exactos, los 76ers se pusieron por delante, aunque un contragolpe de los Mavericks devolvieron el marcador a 82-81. El encuentro se convirtió en un duelo de Run and Shoot, es decir, coger el balón, correr y anotar lo antes posible, volver a defender, y repetir, un bucle donde se repetía el mismo concepto en todas las jugadas.
Los Mavericks salieron vencedores del duelo que mencioné anteriormente, y llegaron al final del tercer cuarto con un marcador de 90-86, con los 76ers apretando una barbaridad, y los Mavericks resistiendo las acometidas de los de Philadelphia, y atacando con contundencia.
Pero, los 76ers no lograron aguantar, y en el arranque del último cuarto, los Mavericks salieron a lo grande, y se colocaron con un contundente 96-86, que dio fin a las esperanzas de los 76ers. Aun con muy pocas opciones de remontar, los 76ers no se rindieron, y siguieron luchando por la victoria, y a falta de 6 minutos y 8 segundos, se colocaron 98-94, a tan solo 4 puntos de los Mavericks, que levantaron cabeza, y anotaron 4 puntos seguidos, y se colocaron 102-94.
Los 76ers siguieron aplicando su juego, y no pararon ningún segundo, atacaban, y presionaban como si en ello les fuese la vida, lo dieron todo, pero por desgracia, los Dallas Mavericks son muy superiores, y Philadelphia tendrá que esperar para su primera victoria.
Resultado final: 110-101
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