Redactado por Alejandro Vega (@JonasMarek)
Cuando el equipo italiano se preparaba para festejar
en Moscú y prácticamente pasar de ronda, Berezutski le puso emoción al
Grupo E de la Champions League.
Alekséi Berezutski es simplemente la consecuencia de la falta de concentración de la Roma en los minutos finales de un partido que tenían encarrilado en Moscú. El conjunto italiano se llevaba el triunfo gracias a un nuevo golazo de tiro libre de su capitán Francesco Totti pero un centro del futbolista ruso con el tiempo ya cumplido sorprendió a De Sanctis y se transformó en el agónico empate 1 a 1 que abre de nuevo el grupo E.
El frío ambiente, tanto por la temperatura bajo cero como por las tribunas vacías, todavía castigadas por la UEFA, contagiaron a ambos equipos, que parecieron tomar recaudos antes de avanzar. Florenzi dispuso de la ocasión más clara en un disparo de cara al arco que se abrió demasiado, en un primer tiempo que tenía predominio de los romanos pero sin profundidad.
Hasta que un avance de Alessandro Florenzi fue frenado con falta en el límite de la línea del área, muy cerca de ser penal. El árbitro sancionó afuera y no fue inconveniente para Totti, que fusiló a Akinfeev y abrió el marcador.
La eliminación parcial del equipo ruso forzó que su defensa se adelantara unos cuantos metros en la segunda mitad, logrando algo más de llegada pero con mayor espacio a su espalda. El belga Nainggolan y el serbio Adem Ljajic tuvieron ciertas chances, pero se apresuraron a patear y desviaron los tiros.
La falta de definición sería un dolor de cabeza en el final, sumado a una defensa dormida. Y fue Berezutski en un centro al área, buscando a la desesperada una cabeza para que desvíe la pelota, encontró la indecisión de los italianos y la floja respuesta de Morgan De Sanctis. 1-1 sobre la hora
Un empate que le mantiene con oportunidades de clasificar a ambos y al Manchester City, además de asegurarle el primer lugar al Bayern Munich.
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