El duelo entre bielorrusos y portugueses era importante para los dos equipos. Los locales apuraban su última oportunidad para seguir en la Liga de Campeones y los visitantes, peleaban por asegurarse la primera plaza.
El Oporto no salió al partido con una gran intensidad. El equipo parecía estar congelado en los primeros minutos, nunca mejor dicho debido al gran frío que hacía, situación que aprovecharon los locales para aproximarse al área portuguesa, aunque sin crear mucho peligro. Poco a poco, el líder del grupo se fue metiendo en el partido, con un gran Casemiro, trabajador en defensa y en ataque. Pero a pesar de que el dominio era para el Oporto, a éstos le faltaban chispa, la chispa de otros partidos no llegaba y lo más interesante de la primera mitad fue un disparo de Jackson desviado. 0-0 al descanso, resultado que aún mantenía las esperanzas de los bielorrusos.Esperanzas que desaparecieron en el minuto 56, Herrera tras un buen pase de Casemiro puso el 0-1. El gol fue definitivo, el Bate no supo rehacerse, el Bate no supo creer en que se podía y se desenchufaron del partido. La poca intensidad que tenían se vio patente en el segundo gol de los portugueses, Jackson empujó el balón al fondo de la portería tras pase de Herrera y ponía el 0-2 con todavía 25 minutos por delante.
Con el partido ya sentenciado el Oporto, sin querer hacer más daño, tocaba y tocaba, sólo por la pasividad de la defensa local Tello se quedó solo contra el portero y puso el 0-3. Con esta derrota el Bate se despide de la lucha por clasificarse a la siguiente fase y peleará la tercera posición contra el Athletic Club de Bilbao. Por otra parte, el Oporto ya es primero matemáticamente.
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