ALINEACIONES:
2. España: Iker Casillas; Juanfran, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba; Busquets, Cesc; Silva, Iniesta, Pedro Rodríguez; y Diego Costa
0. Eslovaquia: Kozacik; Pekarik, Salata, Hubocan, Tesak; Gyömber, Gregus, Hamsik; Hrosovský, Mak y Svento.
Ayer se disputaba en el Carlos Tartiere, el campo del Real Oviedo, la séptima jornada de los partidos clasificatorios para la Eurocopa de Francia 2016. El duelo de ayer era vital para saber si finalmente Eslovaquia seguía afianzada en el liderato o la segunda clasificada, nuestra selección española, podía plantarles cara. Para este partido, Del Bosque tiró de clásicos en su alineación, los Iniesta, Busquets, Casillas, Ramos... pero con una formación inicial de 4-3-3 con "Busi" como único pivote, y los magos Iniesta y Silva de interiores y creando juego.
Después de un inicio tranquilo donde los dos equipos se estuvieron tanteando sin crear muchas ocasiones, llegó el primer error de alguno de los dos equipos, lo cometió Sergio Ramos para España y a punto estuvo de significar el primer gol de los eslovacos. El camero intentó regatear en su propio campo para sacar el balón, pero se lió y perdió el balón, dejando vía libre a Mak para que se dirigiera a la portería de Casillas, pero el delantero visitante no supo aprovechar esta oportunidad, y su tiro se marchó a la izquierda de la portería de Iker en un mal remate y sólo ante el portero.
Tras este primer susto, los españoles volvieron a tomar la batuta, y realizando una jugada "made in Spain" llegó el primer gol de nuestra selección, en el minuto 5 Jordi Alba remataba en el área pequeña un centro maravilloso de Silva, que como el propio lateral dijo, fue un "caramelito" que sólo tuvo que empujar a dentro. El gol le vino muy bien a los chicos de Vicente, que se afianzaron todavía más en su idea de tocar el balón, por momentos se pareció a los mejores tiempos cuando ganamos las Eurocopas y el Mundial, protagonizando un auténtico monólogo sobre el terreno de juego con más de un 75% de la posesión del balón.
Esta situación acabó dando lugar a la acción del segundo gol, después de perdonar varias ocasiones apareció la "Chelsea connection" entre Cesc Fábregas y Diego Costa (algo desaparecido hasta ese momento) que controló el balón y fue derribado por el portero Kozacic, que se llevó amarilla. El penalti fue convertido con maestría por Andrés Iniesta, que engañó al portero con su cuerpo para tirar al lado contrario poniendo el 2-0 en el minuto 25. Después del gol el juego se tranquilizó y España se puso a tocar con menos profundidad, defendiéndose con el balón. Así pasaron los minutos, bastante tranquilos para nuestros intereses, hasta que los visitantes tuvieron la segunda ocasión del partido, un tiro de Hamsik bastante librado, que Casillas despejó bien a córner, y con el posterior saque de esquina despejado se acabó el peligro en la primera mitad.
El descanso pareció venirle bien a la selección eslovaca, que salió con más fuerza y motivación, creando peligro desde el inicio, con la primera ocasión peligrosa a los 4 minutos de la reanudación, con un tiro cruzado que sacó con la punta de los dedos Casillas salvando el primer gol de los visitantes. A España le tocó sufrir en estos primeros quince minutos debido al ímpetu por recortar distancias de los visitantes, robando más rápido el balón y teniendo más posesión, pero no consiguen terminar demasiadas acciones con peligro, y ese ímpetu se va difuninando hasta que desaparece por completo y el partido vuelve a la situación de la primera parte.
Con el partido ya resuelto Vicente Del Bosque empezó a mirar por el siguiente partido el martes contra Macedonia, y realizó los primeros cambios, se fue Cesc por el jugador de la tierra, por el asturiano Santi Cazorla. Y las cosas no cambiaron con ese cambio, pues siguió el dominio de los hombres de rojo, que seguían creando peligro, sobre todo de la mano de Silva, que fue sin duda el mejor del partido, y resultó indefendible para la defensa eslovaca, que lo perseguía como quien persigue a un fantasma, aparecía por todos los sitios, teniendo bastantes ocasiones para marcar de las que desaprovechó todas, incluso aprovechó un intento de chilena de Diego Costa que envió arriba. Un Diego Costa que sería sustituido poco después para dar entrada a Paco Alcácer.
Para cerrar el partido, el entrenador salmantino sacó a Iniesta, que se llevó la mayor ovación del partido, para que entrara Koke. Con la posesión de balón España durmió el partido hasta el final, evitando que le crearan peligro y cerrando el partido con sobriedad. Con estos 3 puntos España empata a Eslovaquia en el liderato, pero el 2-0 de Oviedo es mayor que el 2-1 de Zilina por lo que España se coloca como primera de grupo
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