El Sevilla echó a rodar en esta nueva temporada enfrentándose al Lorca Deportiva en tierras murcianas. El partido se antojaba especial, ya que suponía el regreso de Unai Emery al estadio que lo vio crecer como entrenador. El entrenador de Hondarribia realizó las primeras probaturas reales con la plantilla y dejó buenas sensaciones.
Tras unos primeros compases en los que el gol se resistió, sobre todo en botas de Gameiro, los sevillistas lograron ver portería con un tanto del francés que estrenó el casillero hispalense en esta temporada. Los cambios en la segunda parte, conllevaron un mayor acierto de cara a puerta, en la que destacó una notable actuación del canario Vitolo. El canterano Matos también se sumó a la fiesta y cerró el marcador con el cuarto y último tanto del partido y que fue uno de los representantes de la cantera sevillista junto a Cotán, Carmona, Martínez o Juan Muñoz. También en la segunda parte, el conjunto que ejercía como local se empleó con una dureza desmesurada que causó el enfado de los jugadores sevillistas y de Unai Emery, que acabó expulsado por el árbitro.
El rival, que milita en Tercera División, hace que las conclusiones que se puedan extraer del partido sean escasas, aunque se volvió a ver la gran fortaleza defensiva y el acierto a la hora de anotar por parte de los sevillistas, característicos en temporadas anteriores. El partido supuso el debut con el equipo de algunos fichajes como N’Zonzi, que demostró su gran despliegue físico, además de Immobile y Krohn-Dehli.
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